Los neumáticos son una parte crucial de tu vehículo y su estado puede influir directamente en la seguridad y en el resultado de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV). Aquí te presentamos una guía completa para revisar tus neumáticos antes de llevar tu coche a la ITV:
1. Profundidad del Dibujo
- Verifica que la profundidad del dibujo de tus neumáticos cumpla con los requisitos legales. En la mayoría de los casos, el mínimo permitido es de 1.6 milímetros, pero se recomienda cambiar los neumáticos cuando el dibujo esté cerca de este límite para garantizar un buen agarre y tracción.
2. Desgaste Irregular
- Inspecciona la superficie de los neumáticos en busca de signos de desgaste irregular, como áreas lisas o desgastadas en un lado o en el centro del neumático. Esto puede indicar problemas de alineación o suspensión que deben ser corregidos antes de la ITV.
3. Cortes y Abolladuras
- Examina minuciosamente la banda de rodadura y los flancos de los neumáticos en busca de cortes, grietas o abolladuras. Los daños significativos pueden comprometer la integridad estructural del neumático y deben ser reparados o reemplazados.
4. Presión de Inflado
- Comprueba la presión de inflado de tus neumáticos utilizando un medidor de presión de neumáticos. Asegúrate de que la presión esté dentro de los valores recomendados por el fabricante del vehículo para garantizar un desgaste uniforme y un manejo seguro.
5. Estado de las Válvulas
- Inspecciona las válvulas de los neumáticos en busca de fugas de aire o daños. Asegúrate de que las válvulas estén bien ajustadas y que no presenten signos de deterioro.
Realizar estas verificaciones antes de llevar tu vehículo a la ITV te ayudará a identificar y corregir cualquier problema relacionado con los neumáticos, aumentando así tus posibilidades de pasar la inspección sin problemas y garantizando tu seguridad en la carretera. Recuerda que unos neumáticos en buen estado son esenciales para un viaje seguro y confortable.